miércoles, 13 de febrero de 2013

¡Quieto en la silla!

Una de las cosas que más nos impiden salir de casa con nuestros niños es salir a un restaurante y que no se queden sentados ni un minuto.

Vamos a comer fuera 2. Estar sentado.

Veamos, este es un punto un tanto delicado. ya que nosotros no somos nadie para decir como han de comer tus hijos.

Pero si quieres damos unos consejos.

Olvídate de que tu hijo esté toda la comida entera sentado.
Los adultos molamos muchos... podemos estar cantidad de tiempo sentados (comidas, café, postres, copitas...), pero los niños necesitan moviento... así que busca un sitio donde los niños puedan estar correteando mientras tú haces una explendida sobremesa.

Lleva juguetes sencillos.
Lleva lápices y un libro para colorear o para enganchar pegatinas (o gomets que es como se llaman ahora). Tendrás a unos críos entretenidos hasta que sirvan la comida.

Asegúrate de que el restaurante es apropiado.
Busca un sitio para ir donde haya jardín o zona para niños  para que puedan ir una vez se haya acabado la comida. Si un niño te aguanta toda una comida entera en la silla sin moverse... ¡ya es todo un triunfo con mayúsculas! no esperes más.

Sé realista con tus hijos.
Si tus hijos comen correteando de arriba a abajo, no pretendas que ese día estén quietecitos en la silla... no están acostumbrados a eso.
Si pretendes que un crío que esté para arriba y para abajo cuando suele comer esté sentado todo ese rato en una silla lo pasaréis mal. Vosotros y él.

Enséñale a estar sentado mientras come en casa y así podréis disfrutar de vuestras salidas a cualquier sitio. La calma durará el rato que esté sentado, pero comeréis bien y él lo pasará bien.

Saludos excursionistas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario